Nacido del coche de competición del equipo Bahrain Raid Xtreme conducido por el nueve veces campeón del mundo, Sebastien Loeb, para competir en la carrera más exigente del mundo, el Dakar, el vehículo no se detiene delante de la arena del desierto, las dunas y las pistas de montaña más extremas. De hecho, este Hunter es incluso más potente que la versión pilotada por Loeb, con un aumento del 50% en la potencia del motor biturbo V6 de 3,5 litros y más recorrido de la suspensión para absorber las irregularidades de los terrenos más duros.
Pero si bien el vehículo es incluso más rápido y capaz que el de competición, también es más refinado. Ian Callum, que diseñó el exterior del coche de competición original, ha vuelto al proyecto para crear un nuevo interior más acorde con el uso diario que con las carreras.
Como no podía ser de otra forma, para poder soportar las elevadas cargas que provocan los terrenos más exigentes, este vehículo irá equipado con el mismo modelo de llanta BRAID que el vehículo de competición: Forged DAKAR.